500 gr de harina con 10 gr de proteína por cada 100 gr
280 gr de suero de leche
50 gr de mantequilla a temperatura ambiente
30 gr de miel
10 gr de sal
21 gr de levadura prensada
Cómo preparar el pan de molde rústico ( molde de 25x13x7, 900 gr de masa)
Este pan se elabora con suero de leche. El suero de leche lo obtengo cuando hago yogur griego casero sin yogurtera, y es el líquido que "sobra" después de colar la leche. Si alguien no tiene suero o no le gusta puede substituirlo por leche o agua.
En un vaso pondremos un poco de suero de leche y lo templaremos. Desmenuzaremos la levadura y removeremos hasta que se diluya. Dejaremos en reposo hasta que se active la levadura (sabremos que está activa cuando la superficie se llene de burbujas).
En un cuenco grande pondremos la harina y la sal y mezclaremos muy bien.
A continuación añadiremos el suero de leche, la miel y la levadura activada.
Amasaremos hasta que se mezclen todos los ingredientes. Ahí agregaremos la mantequilla a temperatura ambiente.
Amasaremos de nuevo hasta integrar todos los ingredientes. Si lo hacemos a mano tardaremos unos 15 minutos, dependiendo de la facilidad de cada persona. Si, por el contrario, lo hacemos con máquina, tardaremos unos 8 ó 10. Lo importante es que nos quede una masa fina y brillante, y levemente pegajosa. Enharinaremos la superficie de trabajo y procederemos a bolear la masa.
Enharinaremos un cuenco y pondremos la masa dentro, bien tapada, hasta que doble, como mínimo, su volumen. Esto tardará alrededor de una hora, hora y media, dependiendo de la temperatura que haya en nuestra cocina.
Espolvorearemos con abundante harina el mármol de la cocina y pondremos nuestra masa. Ahora, lo importante, es sacarle todo el aire. Empezaremos aplastándola con las manos y seguiremos con el rodillo de amasar. Iremos dando una forma rectangular a la masa para que coincida con el molde. Yo suelo doblar la masa dos o tres veces para asegurarme que saco la mayoria del aire de la masa, y voy aplanando con el rodillo.
Este pan se elabora con suero de leche. El suero de leche lo obtengo cuando hago yogur griego casero sin yogurtera, y es el líquido que "sobra" después de colar la leche. Si alguien no tiene suero o no le gusta puede substituirlo por leche o agua.
En un vaso pondremos un poco de suero de leche y lo templaremos. Desmenuzaremos la levadura y removeremos hasta que se diluya. Dejaremos en reposo hasta que se active la levadura (sabremos que está activa cuando la superficie se llene de burbujas).
En un cuenco grande pondremos la harina y la sal y mezclaremos muy bien.
A continuación añadiremos el suero de leche, la miel y la levadura activada.
Amasaremos hasta que se mezclen todos los ingredientes. Ahí agregaremos la mantequilla a temperatura ambiente.
Amasaremos de nuevo hasta integrar todos los ingredientes. Si lo hacemos a mano tardaremos unos 15 minutos, dependiendo de la facilidad de cada persona. Si, por el contrario, lo hacemos con máquina, tardaremos unos 8 ó 10. Lo importante es que nos quede una masa fina y brillante, y levemente pegajosa. Enharinaremos la superficie de trabajo y procederemos a bolear la masa.
Enharinaremos un cuenco y pondremos la masa dentro, bien tapada, hasta que doble, como mínimo, su volumen. Esto tardará alrededor de una hora, hora y media, dependiendo de la temperatura que haya en nuestra cocina.
Espolvorearemos con abundante harina el mármol de la cocina y pondremos nuestra masa. Ahora, lo importante, es sacarle todo el aire. Empezaremos aplastándola con las manos y seguiremos con el rodillo de amasar. Iremos dando una forma rectangular a la masa para que coincida con el molde. Yo suelo doblar la masa dos o tres veces para asegurarme que saco la mayoria del aire de la masa, y voy aplanando con el rodillo.
Iremos enrollando la masa.
La colocaremos en un molde previamente aceitado para que nos sea más fácil sacar el pan. Aplastaremos levemente la masa para que ocupe bien todo el molde.
Dejaremos que repose la masa, tapada para que no se reseque, hasta que empiece a sobresalir por el molde. Más o menos una hora. Espolvorearemos con harina la superficie, para dar un toque rústico, y con una cuchilla o cuchillo bien afilado, haremos un corte en la superficie.
Tendremos el horno precalentado a 180°. Meteremos la masa durante unos 30 ó 35 minutos, dependiendo de lo tostadito que nos guste el pan. Sacaremos, esperaremos cinco minutos y sacaremos el pan del molde. Dejaremos enfriar en una rejilla, y cuando esté totalmente frío podremos cortarlo y disfrutar de este pan casero rústico.
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